La presidenta del Concejo, María Eugenia Scmuck, visitó el estudio de Radiópolis (Radio 2) este último viernes del año que la encuentra como intendenta interina de Rosario debido a que Pablo Javkin tomó un descanso. Compartió varias observaciones sobre el desarrollo de la ciudad y también sobre sus propias inquietudes como mujer de la política.
Apenas se sentó ante el micrófono, la pregunta fue si tiene deseo de ser la intendenta de la ciudad, es decir, convertir este interinato, este reemplazo, en un mandato. “Me gustaría, por supuesto, pero falta mucho”, señaló y confesó risueña: “Yo soñaba con ser presidenta, quería ser como Alfonsín”.
Luego, se definió como una mujer a la que le gusta mucho el trabajo: “Soy ejecutiva, Marx me marcó de chiquita –dijo y se volvió a reír–, esto de que la alienación es cuando uno no ve el producto de su trabajo terminado. Yo arranco algo y lo tengo que terminar y creo que la eficiencia tiene que ver con eso, me importa solucionar temas claves, como por ejemplo, la pobreza que es un tema clave para el peronismo y el radicalismo”, sostuvo y consideró: “Preocuparse por las mayorías populares es una bandera que el peronismo le robó al radicalismo de Irigoyen”.
Tras comentar sobre la génesis y motivos de cada uno de sus tatuajes, Schmuck hizo un balance de 2024, un año en el que la irrupción del libertarismo generó mucha incertidumbre y miedo al caos. “En marzo vivimos el momento más difícil que yo recuerde, pero el tiempo le va a dar la razón a Pablo (Javkin) que decía que tenía que haber más control en las cárceles y en la calle”, señaló y añadió al respecto: “El compromiso del gobernador Pullaro que puso a la seguridad como prioridad, el control de las cárceles y de la calle hicieron que Rosario vuelva a respirar tranquilidad, pudimos volver a hacer cosas”.
En ese sentido, destacó “una inversión en obra inédita” para 2025 gracias al apoyo provincial y “a una ciudad que ahorró”. De esta manera mancomunada, se pueden llevar a cabo numerosos proyectos para mejorar la vida de los rosarinos, entre ellos, pavimento y veredas, urbanización de Tablada, Los Pumitas y Banana, luces led y la manuntención de los 43 Centros Cuidar destinados a niños, niñas y adultos mayores. En ese marco, remarcó: “El Estado ha estado siempre, pero se ha perfeccionado con esta gestión. Javkin le dio una vuelta de tuerca a los Centros Cuidar. Sé que falta mucho, pero lo vamos a hacer en los próximos tres años”.
Visiblemente conforme por el curso que han tomado las gestiones en Provincia y municipio, lanzó: “Con el tiempo se va a recordar a Maxi Pullaro como el mejor gobernador de Santa Fe y a Pablo como el mejor intendente de Rosario”.
Luego, se refirió a su vínculo con el intendente al que hoy reemplaza al frente del Palacio de los Leones: “Conversamos sobre los temas, hace años que trabajamos juntos, tenemos diferencias pero nos escuchamos. Cometemos errores y aprendemos juntos, hemos construido un equipo y ahora que podemos hacer cosas se empieza a notar”.
Consultada sobre la relación que sostuvieron con la gestión provincial de Omar Perotti, cuestionó: "¿No fui yo dura? Lo dije, tenía la ciudad abandonada con 70 patrulleros. Mirá ahora con 230. Es impresionante cómo cambia todo. No era tan difícil quitarle los privilegios a los líderes criminales, el home office como decía Pablo. Fijate que cuando se controló todo, la cosa fue mejor”.
Estado presente
Schmuck aseguró que mejorar la recolección de la basura es la prioridad para 2025. “Mi obsesión para el año que viene, bueno, en una semana”, ironizó. Tras confirmar que el pliego y la licitación serán una realidad para el primer semestre del año que empieza: “El presupuesto 2025 prevé el dinero para renovar el 33 por ciento de los contenedores que no están, están viejos y eso es responsabilidad nuestra”.
A continuación, confió que no se aprobó el pliego a fines de 2023, ya que hubo un acuerdo político para no dejarle a un nuevo intendente –aún no se había votado–una serie de condiciones para prestar el servicio.
Asumió que está por fuera de la moda del Estado limitado que impera en este tiempo político liderado por Javier Milei. En este aspecto, renovó sus intenciones de regular todos los servicios, incluido el del transporte. “Los taxistas se amigaron conmigo, después de rechazar mi intención de ponerle igualdad de condiciones a Uber. El mercado no puede solo, hay que regularlo, pero lamentablemente no tuve éxito en esa tarea”, observó.
“El Estado tiene que estar y controlar al chofer y al auto. Hay que regular Uber, que pague un canon, que tenga un chofer habilitado, pero no va a pasar, menos en el contexto este”, lamentó.
Tarot político y revelaciones
Como cada viernes, el periodista político Damián Schwarzstein tiró el tarot. La pregunta elegida por el conductor Roberto Caferra fue cómo será 2025 para María Eugenia. Las cartas fueron favorables: salió El Mago que indica que hay un proyecto por delante que, aunque no lo tiene claro, cuenta con las herramientas para ejecutarlo. Además, salió La Torre y con ella fue un consejo: encontrar algo disruptivo en el discurso para llegar a donde desee.
En medio de la tirada, la intendenta interina habló de su rol en el Concejo en el que, según declaró, aprendió la templanza, la paciencia y la aceptación de las diferencias. “Es un cuerpo muy diverso, pero toda la gente que hay es buena”, dijo.
Interrogada acerca de la tensión con Ciudad Futura, Schmuck mantuvo su actitud zen: “Creo que hay que dejar de estar en campaña electoral y laburar juntos. No lo logramos este año, pero tenemos que retomarlo el año próximo. Tengo las puertas abiertas, tuvimos una historia de laburo que se tiene que repetir”, manifestó y concluyó a modo de mensaje: “Hay que construir el diálogo como herramienta principal por más que garpe la grieta a nivel nacional. Hay que trabajar juntos porque le hace bien a la ciudad”.