A poco de haber sido retirado un perro muerto en un vehículo este martes, en pleno microcentro de Rosario, donde fue dejado algunas horas por su dueña en calle Corrientes y Santa Fe, surgen los interrogantes sobre qué pena puede caberle a la joven. Su abogado aseguró que se trata sólo de una contravención, porque no fue una muerte con dolo -es decir, intencional-, sino “un error por olvido” y excusó a la mujer.

Cabrá a la investigación judicial establecer si la joven tuvo algún grado de intencionalidad sobre su accionar, pero en cuanto a lo que las leyes penales prevén, es poco probable que llegue a tener una pena de reclusión. La mujer de 30 años quedó demorada por la tarde en la comisaría 2ª, luego de haber realizado su declaración, mientras que su vehículo fue llevado al corralón municipal ya que estaba mal estacionado, en los primeros metros de la cuadra.

El asunto es complicado, ya que el sistema penal se rige por el principio de legalidad, lo que significa que “para saber si estamos frente a un delito o no, hay que detectar esa conducta tipificada en alguna ley penal”, explicó el abogado penalista Gustavo Ballacchino en Telenoche (El Tres).

En materia animal, el letrado precisó que “la ley vigente es muy vieja, de hace 70 años, y hace una distinción entre maltrato y crueldad, pero en ambas tienen una pena muy baja, de un año de prisión. Maltrato es mal cuidado, destinarlo a tareas laborales, mientras que crueldad es más bien tortura o una mutilación. Pero es una pena baja en ambos casos”.

De todas maneras, el penalista estableció que el “olvido” de su perro en el auto puede que la excluya de una pena, y que “podría ser una falta por el Código de Faltas municipal, donde se precisa la sanción a quien deja un animal en un lugar sin adecuada alimentación y por el clima. No prevé pena de prisión, a diferencia de la ley de maltrato animal, sino que contempla una multa económica, que puede llegar a ser alta”.

El abogado luego esbozó la hipótesis de cómo sería la situación penal de la mujer si estuviera vigente la ley nacional propuesta por el presidente Javier Milei, conocida como “ley Conan” en recuerdo de su perro muerto: “Antes que nada, habría que analizar si la conducta encuadra en un tipo penal, y en este caso podría cumpliría alguna pena de prisión, ya que el criterio sería similar al que se aplica en el Código de Faltas municipal”, cerró Ballacchino.

Coco se llamaba el perro que este miércoles por la tarde fue encontrado sin vida dentro de un Peugeot 208 color gris, en calle Corrientes al 600, y según vecinos y comerciantes de la cuadra, permanecía encerrado desde la mañana temprano. Luego la defensa de la acusada sostuvo que había estacionado allí al mediodía.

Un efectivo de la policía precisó al móvil de Radio 2 que al arribar, pasadas las 18, decidieron no romper el vidrio porque "se podía observar a simple vista que la mascota ya estaba sin vida", producto del calor y la falta de oxígeno en el encierro. En medio de la consternación por la noticia y el asedio verbal sufrido por algunos vecinos y proteccionistas cuando llegó al lugar, la dueña del coche y del perro sufrió una descompensación por la que fue atendida por médicos del Sies antes de quedar demorada en dependencia policial.