La Casa Imaginada es el espacio dedicado a las infancias y juventudes que se encuentra en la Biblioteca Argentina (ingreso por calle Santa Fe 1553), y que es una gran opción de visita para los últimos días de enero y todo febrero, que cuenta con juegos de mesa de todo tipo y con un catálogo envidiable, de 12 mil libros para elegir.
El acceso desde dentro de la biblioteca es por el patio detrás del Salón de Lectura, y al atravesar la puerta antigua vidriada se observa la Sala Ovalada central. Una mesita y muchas sillas invitan a dibujar o a leer en voz alta. El espacio está rodeado por otros cuatro salones, cada uno con su impronta: el Recibidor, el Lucernario, la Beboteca y la sala de Mundos Posibles.
La característica distintiva de la Casa Imaginada es que sus libros fueron dispuestos en sus estanterías abiertas para que los niños y jóvenes exploren los títulos y se dejen tentar por el lomo, para elegir lo que quieran leer. Todo es gratuito, y los chicos y jóvenes pueden asociarse. A los más pequeños se les otorga un carné en el que pueden dibujarse en un recuadro.
"El concepto de las estanterías abiertas es la esencia de la Casa Imaginada. Una perspectiva maravillosa que invita, es la posibilidad y el derecho de elegir lo que van a leer. La proximidad de acercarse a elegir es fundamental", compartió Andrea Peruzzi, una de las coordinadoras del equipo de Gestión y Comunicación de la Biblioteca Argentina, y compartió en Rosario3.
La Casa Imaginada es coordinada por Ricardo Gómez, y su equipo bibliotecológico hace préstamos y recomendaciones, Desde hace un tiempo, cuenta con un espacio de lectura accesible, con libros en lenguaje Braille para personas con disminución visual o ciegas.
En el Recibidor se realizan consultas y se tramitan préstamos de libros. El Lucernario, con sus almohadones, sillas y taburetes, es un sitio para encuentros y narraciones compartidas. Y en la esquina está la Beboteca, con almohadones mullidos y títeres dedales, muñecos de tela, juegos de madera, artículos para dibujar, y caligramas para hacer. En la sala de los Mundos Posibles hay manuales, enciclopedias, diccionarios y libros especializados, así como colecciones literarias para todos los gustos, acceso a Internet a través de soportes digitales y pantalla con juegos.
La coordinadora destacó que hay decenas de lectores asiduos que son tan voraces que a constantemente se necesita renovar el catálogo para seguir ofreciendo, por lo que siempre se está al tanto de novedades editoriales para ellos. “Los chicos más grandes nos piden historietas y mangas, historias de fútbol", comentó.
El espacio infanto-juvenil abre en enero de 8.30 a 13, pero desde febrero, permanecerá abierto hasta las 19. Destacó que, además de acercarse por la lectura, “la biblioteca es un refugio climático, ya que es un espacio fresco, donde se puede tomar agua en dispenser, y guarecerse del calor, como espacio público que es”.
Presentaciones de libros, juegos de mesa y lectura accesible para los peques
Este espacio cuenta con presentaciones de libros de todo tipo durante el año, pero durante el verano, y hasta este viernes 31 de enero, desarrolla el ciclo Mañanitas de Lectura, cada miércoles a las 10 en la Sala Ovalada, y cada viernes en el balneario La Florida (donde se puede participar ingresando sin necesidad de abonar la estadía). “Mañanitas de Lectura es una actividad que venimos realizando para construir diálogo entre escritores de la ciudad y editoriales rosarinas, para acercar los libros desde sus propios autores a los chicos. Los viernes es en La Florida, lo coordinamos con el equipo del balneario, al lado del bar Mooi, y suelen participar decenas de niños desde colonias, pero se suman los chicos y grandes que estén disfrutando en la playa, y después se proponen juegos de mesa y dibujo”, precisó Andrea. Además de las presentaciones, en un salón hay dos mesas grandes con juegos de ajedrez y con juegos antiguos, como de la edad media, de países como Irlanda, Grecia o Italia. “Para esta propuesta, varios miembros del equipo hicieron una investigación sobre cómo eran esos juegos, y construyeron ellos mismos las piezas. Los antiguos son juegos que se juegan de a dos personas. Y en una pantalla se ven las instrucciones. En esa sala hay leyendas, manga, historietas y géneros de adolescentes”, detalló. Finalmente, destacó sobre el espacio de libros accesibles, que “estas políticas de inclusión son muy importantes", y señaló: "Esto surgió cuando la escritora Rocío Muñoz Vergara, quien tiene visión reducida, nos expresó que no encontraba forma de leerle los libros a su hijo pequeño. Muchos libros fueron adaptados con letras de Braille, y al ser este transparente, no tapa las ilustraciones”. La Casa Imaginada recibe libros infantiles en buen estado, escribiendo al correo casaimaginada@rosario.gov.ar.