Duro golpe para un Newell’s sin rumbo: fue goleado por Banfield

Newell’s abrió el telón de la segunda fecha con una dura goleada en contra ante Banfield, que lo venció 3-0 este lunes a la noche en el estadio Florencio Sola y le sembró más dudas al arranque de temporada del conjunto rojinegro de Mariano Soso, que había perdido en el debut de local. 

El Taladro se impuso con dos tantos de Nasif, el primero de ellos y el que abrió el partido tras un polémico penal sancionado al lateral leproso Tabares, y otro de Alaniz. La Lepra ganó una sola vez de las últimas diez que salió de Rosario y acumula dos derrotas consecutivas en el inicio del Apertura 2025. 

Un primer cuarto de hora de estudio mutuo dominó la escena en el Florencio Sola, con Newell’s buscando libres a Banega o Maroni, aunque Banfield los mantuvo a raya, bien presionados, y al menos de entrada no pudieron establecer diferencias en ofensiva. 

La Lepra tuvo la primera jugada clara para convertir a los 18 minutos, cuando Silvetti, con un toque veloz, puso a correr a Jacob por la banda derecha, el lateral rojinegro llegó hasta el fondo y ensayó un derechazo cruzado que obligó al arquero Sanguinetti a revolcarse para despejar al tiro de esquina. 

La presión continua del Taladro fue un problema para el conjunto de Soso, que muchas veces tuvo que jugar largo sin darle un destino claro a la pelota. El juego era dinámico, pero impreciso y con pocas chances para quebrar el cero. Los intentos del local se dieron, sobre todo, por los extremos, para tratar de lastimar a espaldas de los laterales rojinegros. 

Newell’s volvió a llegar con peligro a los 26 de la primera parte, luego de otra réplica veloz que tomó al equipo de Broggi saliendo. Maroni buscó a Silvetti, el extremo avanzó a pura gambeta y lanzó un centro rasante que tomó Jacob en el segundo palo, pero el defensor leproso, otra vez, no pudo vencer al guardameta.

Banfield, que no había podido hilvanar demasiado juego cerca del área visitante, abrió el partido tras un polémico penal que el árbitro Sebastián Martínez le cobró a Tabares sobre Nasif. No pareció falta, pero ni siquiera lo alertaron desde el VAR, y el nueve del Taladro lo cambió por gol con un remate inatajable para Reinatti. 

Allí el encuentro se empezó a romper y la actuación del juez quedó en el ojo de la tormenta. Casi de inmediato, Nasif escapó en soledad con destino al arco leproso, Lollo se tiró al suelo a barrer y lo bajó al borde del área grande. Martínez la dejó pasar, tampoco apareció el VAR. Era roja para el zaguero.

La noche se puso aún más tormentosa para el Newell’s de Soso apenas unos segundos antes de irse al descanso, ya que los del sur del Gran Buenos Aires aprovecharon la pasividad rojinegra, tras un lateral, y se pusieron 2-0 con un grito de Alaniz. Luca Sosa quedó pagando, Lollo se comió un caño y Reinatti no pudo tapar el remate. 

Aún sin merecerlo, la desventaja de dos goles hizo mella en el vestuario rojinegro y el DT sorprendió al salir a jugar el complemento sin Lollo en la defensa, con el ingreso de Chiaverano en el ataque. Acomodó la defensa con cuatro jugadores, bajando a Reggiardo y a Jacob. 

No hubo mucho tiempo para analizar la posible influencia de esos cambios en el funcionamiento del equipo. Otro gol del Taladro, el tercero de la noche y nuevamente obra de Nasif, hundió mucho más al conjunto rosarino en la desazón. Lucía entregado y sin reacción.

Newell's mostró cierta reacción en la recta final, sobre todo a partir de algunos ataques en los que Funez logró imponerse en el área rival, pero a su vez el conjunto de Broggi contó con varias oportunidades para hacer que la goleada sea más abultada. 

El equipo de Soso se fue al descanso dos goles abajo y sin merecerlo por lo hecho en los primeros 45 minutos, pero jamás pudo recuperarse de los golpes del Taladro, terminó entregado y desdibujado, con pocas ideas en ofensiva y severos problemas para defender. Un comienzo de año que preocupa.