En la continuidad de la fecha 21 de la Liga Profesional, Newell’s perdió en el Coloso 4 a 2 ante Huracán, que alcanzó en la punta a Vélez. El hincha leproso se fue enojado y hubo algún que otro incidente en la zona de palcos. Incluso, un par de ellos se metieron en el campo a reprocharle en la cara a los jugadores el momento deportivo.
Rodrigo Cabral y Eric Ramírez marcaron antes de la media hora de partido y luego descontó Juan Manuel García. En el complemento, Walter Mazzanti y Rodrigo Echeverría anotaron para el Globo y decretaron la goleada. Colo Ramírez volvió a descontar para el rojjinegro.
Newells jugó un primer tiempo extraño. Generó mucho peligro, hizo figura al arquero rival, metió dos tiro en el travesaño y hasta hizo un gol; pero se fue al descanso perdiendo 2 a 1.
La explicación está dada por los errores groseros defensivos, por los espacios sin cubrir y porque las dudas se contagiaron y le permitieron al rival sacar dos de ventaja antes de la media hora.
Las ilusiones del gol de Juanchón se apagaron demasiado rápido para el hincha. En el inicio del complemento, Mazzanti aprovechó otro horror defensivo y, de contra, metió el tercero. El golpe fue tan duro que Echeverría metió el cuarto inmediatamente, con una acción deficitaria de Macagno.
El partido terminó a los diez minutos del segundo tiempo. Es cierto que llegó el gol del nuevo descuento, esta vez de Colo Ramírez, pero lo concreto es que nada modificó lo que ya estaba consumado: la derrota y la bronca.
El clima tomó tal estado que en las plateas que están debajo de los palcos se registraron algunos incidentes. Y hasta dos hinchas se metieron en la cancha a reprocharles en la cara a los jugadores lo que estaba ocurriendo.
El ciclo del técnico Ricardo Lunari empezó con el impulso de un par de victorias en casa, que le dieron algo de oxígeno, pero sin sustento futbolístico eso solo puede durar un breve lapso de tiempo.
Ya lleva cuatro fechas sin sumar de a tres –derrotas ante Godoy Cruz y Unión, empate con Sarmiento y ahora goleada ante Huracán en contra–.
En el Coloso se vivió otra noche negra para la Lepra, que hubiera preferido que el partido se termine mucho antes. También hubiera preferido eso Huracán, que veía muy cerca la cima del campeonato, antes de que Vélez juegue su partido.
De todos modos, el mazazo que sufrió Newell's hace temblar los cimientos. Quedará la derrota, pero también vienen añadidas la bronca, la incertidumbre y el clima irrespirable. Todo huele mal en el Parque Independencia.