Luego del asesinato del líder Andrés Pillín Bracamonte y de su ladero Daniel “Rana” Attardo, a la salida del Gigante de Arroyito, desde el Ministerio de Seguridad de Santa Fe le solicitaron formalmente a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) que el partido del Canalla contra Racing –que será el primero en Rosario tras el doble crimen– se juegue más temprano para que termine de día. 

Según confirmó la cartera de Seguridad, tras la venia de la casa madre del futbol argentino, el encuentro entre las Academias por la fecha 25 de la Liga Profesional se jugará el sábado a las 17 para que no finalice de noche. 

Las autoridades del Ministerio de Seguridad santafesino iniciaron hace unos días conversaciones informales con la entidad que preside Claudio Tapia para gestionar el cambio de hora, pero ante la falta de respuesta, el pasado lunes hicieron el pedido formal mediante una nota. La dirigencia canalla lo respalda. Ahora llegó la respuesta positiva.


El objetivo es que el partido empiece y termine con luz natural, aunque a la par también se trabaja en una reformulación del operativo de seguridad en la cancha debido a posibles réplicas o escaladas de violencia relacionadas con el asesinato de los jefes de la barra brava auriazul, ultimados a tiros luego del partido de Central ante San Lorenzo cuando estaban sobre una camioneta en la zona de calles Avellaneda y Reconquista, muy cerca del estadio. 

Hace unas semanas, la dirigencia auriazul tomó otra decisión de carácter preventivo al limitar el horario de uso del predio conocido como Caribe Canalla durante los miércoles y jueves, por tiempo indeterminado, ya que esos son los días habituales de reunión de los barras. 

Con la música a otra parte

 

Por disposición del ministerio de Seguridad, quienes ocupen las dos bandejas de la Popular Norte no podrán llevar a ese sector “banderas, estandartes, instrumentos musicales, ni redes con imágenes de la institución”.