El Índice de Producción Industrial (IPI) que elabora FIEL registró en julio una contracción interanual de 5,2 por ciento, cifra que retrata una reducción en el ritmo de caída en la comparación con lo registrado en meses previos.

Pese a esto, el relevamiento de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas indica que la actividad industrial acumula un retroceso de 10,9 por ciento en los primeros siete meses del año.

La rama de los alimentos y bebidas registró en julio un ligero avance en la comparación con julio del año pasado, debido a un aumento en la producción de alimentos, que más que compensó la caída en la de bebidas.

Entre estos alimentos, FIEL destacó: “El aporte de la producción de aceites y el menor ritmo de contracción en la faena vacuna y la lechería".

Respecto a los sectores que en julio mostraron una marcada reducción en el ritmo de caída, el de mayor importancia fue el de la metalmecánica. En esta rama, se observaron mejoras en la producción de autopartes, cables y en plantas dedicadas a la maquinaria agrícola, cuyas ventas mostraron en julio la primera mejora interanual desde noviembre del año pasado.

En paralelo, el mejor registro de actividad continúan mostrándolo los proveedores de los sectores de la energía y minería.

La rama automotriz también reveló un importante freno en el ritmo de contracción y en julio alcanzó el mayor nivel de producción desde noviembre pasado.

Finalmente, el sector de los minerales no metálicos fue otro que en el mes tuvo una importante reducción en el ritmo de caída interanual, y se observó al interior de la rama productos con alzas respecto a julio del año pasado.

Otros indicadores


Las ventas de insumos de la construcción recortaron la caída interanual observada en meses previos. En los primeros siete meses del año, la producción industrial redujo la caída hasta 10,9 por ciento en la comparación con el período enero julio de 2023.

Desde FIEL, informaron que la rama de actividad que acumula el mayor retroceso es la de los minerales no metálicos con una contracción de 28,3 por ciento, seguida de la producción automotriz que acumula una caída del 24,4 por ciento, las industrias metálicas básicas (19,5%), la metalmecánica (15,1%), los despachos de cigarrillos (13,8%) y la producción de químicos y plásticos (12.1%), en cada caso en los primeros siete meses y en la comparación con el mismo período del año pasado.

Con una contracción menor que el promedio se coloca el sector de los alimentos y bebidas con una merma del 3,6%, seguido de la producción de papel y celulosa (2,1%) y el proceso de petróleo (1,5%), en cada caso en el período enero julio y en la comparación con el mismo período de 2023. Finalmente, la rama de los insumos textiles igualó (0,2%) el nivel de producción de los primeros siete meses del año pasado.

En la síntesis, FIEL consigna que: "La actividad fabril registró en julio una nueva caída interanual de menor profundidad en la comparación con el acumulado en meses previos, que podría interrumpirse en agosto. La rama de alimentos y bebidas mostró un positivo respecto al nivel alcanzado en julio del año pasado, mientras que en actividades puntuales también se tuvieron mejoras. Finalmente, la mejora de la producción en términos desestacionalizados fortaleció los indicadores que señalan el freno en la caída de la actividad, sin que ello permita anticipar la velocidad y sostenibilidad de una potencial recuperación en los meses por venir".