Los vecinos de un edificio en Iriondo y San Luis fueron evacuados por la presencia de humo y olor a quemado, ante el temor de un incendio el pasado viernes después de la medianoche. Se realizó un corte de calle, en un despliegue operativo de Bomberos Zapadores y Voluntarios, patrulleros policiales y ambulancias del Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (Sies), y de una medicina privada que asistieron a varios por la inhalación tóxica. 

Al romper la puerta del departamento de donde salía el humo, los bomberos encontraron que éste provenía de una pastilla de desinfección que está prohibida la venta al público. El producto ignífugo en el departamento era Gamexane, un agrotóxico prohibido en Argentina desde 1995, que se utilizaba para desinfectar de insectos los silos en el campo. Esto produce gran cantidad de humo blanco, lo que produjo la confusión de que fuera un incendio.

Producto de la cantidad de humo que salía del departamento, varios vecinos linderos fueron asistidos con dificultad respiratoria, y en el mismo piso vive una familia cuya hija de dos años es electrodependiente. Celina es la madre de la niña, quien fue la más afectada, y contó a Rosario3 que toda su familia debió evacuarse hacia el balcón, y que al día siguiente se cruzó en el pasillo a unos inquilinos nuevos, que le confirmaron que ellos habían prendido la pastilla de Gamexane.

La vecina del piso recordó sobre el susto vivido: "El Sies nos asistió a todos. Yo soy asmática, y no podía parar de toser y sentir ganas de vomitar. Al día siguiente, todos teníamos dolor de garganta y de cabeza. La nena hasta hoy sigue con tos seca. Ella tiene displasia broncopulmonar severa porque nació prematura, una enfermedad respiratoria, y tiene internación domiciliaria con atención enfermeros de 24 horas”.

Sobre el momento en que detectaron el humo y se autoevacuaron, Celina precisó: “El enfermero le dijo a mi marido que sentía un fuerte olor a quemado. Mi marido pensó que era un cable, y revisó todos los enchufes. Cuando abrimos la puerta al pasillo, era una nube de humo impresionante, y me fui a despertar a la vecina de al lado que es una señora mayor”.

Ante la gran cantidad de humo, la familia y su vecina de al lado se autoevacuaron hacia el balcón y cerraron la ventana mientras los bomberos neutralizaron el humo: “Nos quedamos ahí afuera hasta las dos de la madrugada y con todos los elementos para la respiración de mi nena”.

Al día siguiente, con la puerta rota por los bomberos, Celina pudo ver la pastilla desinfectante en el piso, que fue dejada sobre una bandeja de horno. “Mi padre es ingeniero agrónomo. Me explicó que en el campo eso se utiliza en galpones para evitar las lauchas y ratas, pero que está prohibida la venta en el país, pero se consigue igual”.

El material fumígeno que fue colocado en la medianoche del viernes y provocó temor de incendio y el operativo de evacuación.

Una práctica ilegal y peligrosa, pero recurrente

Ante la frecuencia de esta práctica, Bomberos Zapadores recordó a la ciudadanía sobre “la importancia de avisar a los otros habitantes del edificio cuando se producen desinfecciones".

Un año atrás ocurrió el mismo susto y evacuación en un edificio céntrico en Laprida al 900, por el uso del mismo tipo de producto tóxico en uno de sus departamentos. En ese caso era un fumígeno de marca Bolatte, cuya venta libre está prohibida, y los efectos fueron mayores en los vecinos, con irritación en los ojos, además de dificultades respiratorias.

El Gamexane es un plaguicida que está prohibida su venta desde 1995 en el país por su alta toxicidad. Entre sus compuestos figura el hexaclorobenceno y el diclorodifenil tricloroetano, más conocido como DDT, un poderoso insecticida rechazado por la legislación en casi todo el mundo