Entre las actividades virtuales, que se podrán ver en la página www.porunaargentinalibredeacv.com, se encuentran talleres de alimentación saludable, manejo dinámico del stress, charlas de prevención, reconocimiento de síntomas, entrevistas con profesionales, foro de pacientes, consejos para aprender a vivir con la enfermedad y manejo de los factores de riesgo, entre otros.

Dentro de las propuestas habrá clases virtuales de gimnasia, yoga y respiración; además, para profesionales de la salud y enfermeros se dará un curso de capacitación gratuito sobre el tratamiento agudo del Accidente Cerebro Vascular.

Por último, un coro interpretará "Resistiré" y se proyectarán los videos del concurso de baile @WStrokeCampaign para crear conciencia sobre los accidentes cerebrovasculares y la prevención.

Se trata de una campaña internacional organizada por la World Stoke Organization, que en Argentina es impulsada por el grupo de Enfermedades Cerebrovasculares de la Sociedad Neurológica Argentina y la Asociación por una vida libre de ACV, junto a empresas y laboratorios.

En la Argentina, se estima que se producen unos 60.000 nuevos casos de ACV por año, siendo la primera causa de discapacidad y la tercera de muerte.

"Si bien algunas patologías de base pueden ser condicionantes para el desarrollo del ACV, como una Fibrilación Auricular, la mayor parte de los factores de riesgo se encuentran asociados al estilo de vida. Entre ellos se encuentran la hipertensión arterial, la diabetes, la obesidad, el colesterol, el estrés, el tabaquismo, el sedentarismo y la mala alimentación", informaron los organizadores de la campaña.

"La hipertensión arterial es el de mayor frecuencia entre quienes sufren un ACV. Tener la presión arterial controlada y en los valores adecuados disminuye en un 30% a 40% las posibilidades de tener esta enfermedad", señaló la neuróloga María Martha Esnaola, miembro del Servicio de Neurología del Hospital César Milstein.

La especialista puntualizó que "en la Argentina, una de cada cinco personas que sufre un ACV tiene diabetes y la mayoría de los factores de riesgo que comprometen a ambas patologías se pueden controlar con cambios en el estilo de vida y/o con medicación".

En ese sentido, continuó: "Lo mismo sucede con quienes tienen colesterol elevado, ya que al modificar su rutina diaria pueden mejorar estos índices y disminuir los riesgos de tener un ACV".

También el tabaquismo, el consumo excesivo de alcohol, el sobrepeso, el sedentarismo, los cuadros depresivos y el estrés pueden favorecer un ACV, al igual que el sobrepeso y la obesidad, que incrementan los riesgos en un 22 y 64 por ciento respectivamente.