El dengue es una enfermedad viral transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti. Cuando el mosquito se alimenta con sangre de una persona infectada por dengue, este se replica en el mosquito y luego de 8 a 12 días se vuelve infectivo, transmitiendo el virus a través de la picadura a otras personas. Durante el último mes se reportaron en Argentina más de 8000 casos y desde el ministerio de Salud lanzaron una campaña de precaución. 

Dentro de los síntomas del Dengue, se encuentra la fiebre acompañada de uno o más de las siguientes manifestaciones: dolor detrás de los ojos, de cabeza, muscular y de articulaciones. Náuseas y vómitos; Cansancio intenso; Aparición de manchas en la piel; Picazón y/o sangrado de nariz y encías

Según el Ministerio de Salud de la Nación, no hay vacuna ni tratamiento específico para el dengue. Por ello, el tratamiento es fundamentalmente sintomático. Ante estos síntomas se debe acudir al centro de salud de inmediato para recibir el tratamiento adecuado y no automedicarse.

A las personas infectadas se les recomienda tomar abundante agua para reponer líquidos y realizar control y seguimiento médico diarios. 

Además, de Nación hicieron fuerte hincapié en la prevención. Para eso es fundamental eliminar todos los recipientes en desuso que puedan acumular agua (como latas, botellas, neumáticos). Dar vuelta los objetos que se encuentran en el exterior y pueden acumular agua cuando llueve (baldes, palanganas, tambores, botellas). 

También recomiendan cambiar el agua de bebederos de animales, colectores de desagües de aire acondicionado o lluvia, dentro y fuera de la casa, cada tres días. Frotar las paredes de los recipientes con una esponja o cepillo a fin de desprender los huevos del mosquito que puedan estar adheridos.

Rellenando los floreros y portamacetas con arena húmeda, manteniendo los patios y jardines limpios, ordenados y desmalezados. Limpiando canaletas y desagües de lluvia de los techos. Tapando los tanques y recipientes que se usan para recolectar agua y vertiendo agua hirviendo en las rejillas y colocándoles tela mosquitera.