Luiz Inácio Lula da Silva fue electo presidente de Brasil este domingo y el búnker del Partido de los Trabajadores (PT) fue una fiesta. Y en medio de tanta celebración y con todas las cámaras y la atención sobre él, Lula se puso una gorrita con la inscripción "CFK 2023", en todo un gesto político de apoyo a una posible candidatura de la actual vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. 

El hecho no pasó desapercibido y las imágenes del líder del PT con la gorra recorrieron los portales de todo el mundo. Sin embargo, no es la primera vez que el accesorio aparece en imágenes. Cristina Kirchner se puso la misma en agosto de este año durante el acampe fuera de su residencia en el barrio porteño de Recoleta. 

Cristina Brítez, diputada nacional del Frente de Todos por la provincia de Misiones y de históricos lazos con la dirigencia del PT, es quién le alcanzó la gorra al flamante presidente electo. Britez ya había viajado a Brasil para acompañar a Lula en diversas ocasiones, especialmente en abril de 2018 cuando fue detenido tras un fallo arbitrario del Poder Judicial de su país.

Sin embargo, el pasado lunes 24 de octubre, en una entrevista en Radio El Destape, Máximo Kirchner habló de cara a las elecciones presidenciales de 2023 y dejó abierta la puerta sobre lo que pasara el año que viene. "Creo que Cristina no va a ser candidata", contó. 

Por su parte, a vicepresidenta saludó y celebró el triunfo a través de Twitter. "Hoy más que nunca, amor y mucha felicidad. Gracias pueblo del Brasil. Gracias compañero Lula por devolverle la alegría y la esperanza a nuestra América del Sur", escribió.