Una mujer que está acusada de haber participado de maniobras de lavado de dinero entre el 29 de junio de 2006 y el 14 de abril de 2007 que favorecieron a Mario Roberto Segovia, condenado como el “Rey de la efedrina”, recibió a principios de mayo una suspensión de juicio a prueba, por el que deberá realizar tareas comunitarias durante un año en Cáritas Rosario y pagar una multa económica. Se trata de Melisa Cecilia Montes, quien actualmente figura al mando de una inmobiliaria de Rosario.

Según la acusación de la Justicia federal, Montes y otras tres personas “administraron dinero de origen ilegítimo proveniente de la actividad del narcotráfico desplegada por Mario Segovia a fin de brindarle apariencia lícita”. 

En el expediente, por el que indagaron a Montes en 2016, se sostiene que la mujer participó “en diferentes operaciones de transferencias monetarias efectuadas por personas domiciliadas en la Argentina y México a través del servicio Western Union –quien reportó las operaciones sospechosas– entre el 29 de junio de 2006 y el 14 de abril de 2007 por un monto de 2.996.040,65 pesos”.

Montes, al momento de los hechos, trabajaba en la empresa CTI –actualmente, Claro–. Un compañero suyo de trabajo, Pablo Rodríguez –coimputado–, declaró ante la Justicia que conoció a Mario Segovia en una peluquería del centro de Rosario y este le ofreció recibir plata a cambio de cobrar giros de dinero. Como no le había parecido delito, convocó a la mujer para que también hiciera unos pesos extra.

De acuerdo a los dichos del propio Rodríguez, Segovia se presentaba como “Nicolás” y los acompañaba a recibir las transferencias. Luego, Segovia se llevaba el dinero y le daba plata a él y a Montes por el “trabajo”. 

A 18 años de los hechos atribuidos, la defensa de la mujer y el Ministerio Público Fiscal llegaron a un acuerdo, que fue convalidado por el Tribunal Oral Federal Nº 2 de Rosario,  para que ella haga una suspensión de juicio a prueba.

La probation consiste, según la resolución, en hacer tareas comunitarias tres horas semanales en Cáritas por el plazo de un año –tendrá que hacer mantenimiento, limpieza y acomodar ropa y mercadería–, presentar constancias de cumplimiento de dichas acciones y pagar 150 mil pesos en concepto de multa más otros 80 mil pesos en concepto de reparación de daño que serán destinados a la Sedronar.