La policía de Santa Fe había realizado varios allanamientos en procura de desarticular una banda de Santo Tomé vinculada con el narcotráfico. Sin embargo, no había resultados positivos. La banda enterraba su cargamento de droga y por eso no conseguían atraparlos.

Fue entonces que la Policía Federal Argentina comenzó a realizar tareas de inteligencia sobre los presuntos integrantes de la banda y en una de tantas escuchas encontraron la respuesta que buscaban.

El pronóstico de fuertes y largas lluvias sobre territorio santafesino hizo que Ivan Ezequiel M. de 33 años, se comunicara con un otro integrante de la banda. Allí le insistía con la necesidad de mover el cargamento, cambiarlo de lugar. Le manifestaba que debían llevarlo a un lugar seco. 

Rápidamente, se armó un operativo para tratar de encontrarlos in flagranti y los agentes federales dieron con uno de ellos cuando movía unos 9 kilos de cocaína. 

La organización se encargaba de la distribución de estupefacientes en la ciudad de Santa Fe, aunque los operativos se dieron en Santo Tomé, en el barrio El Caquero. Se denominó Pozo Blanco.