El viernes 13 de diciembre de 2029, la Tierra recibirá un visitante: el asteroide Apofis, el "dios del caos". Una nueva investigación sugiere que si otras rocas espaciales mucho más pequeñas chocan con Apophis, el asteroide, podría ser redirigido y la Tierra.

El asteroide, llamado así por el dios egipcio del caos y la destrucción, Apep, pasará a 30.600 kilómetros de la Tierra, tan cerca de nuestro planeta que podría ser visible a simple vista. 

El autor de la investigación, Paul Wiegert, astrónomo de la Universidad de Western Ontario, dijo al sitio especializado Space.com que las probabilidades de que un asteroide impacte en Apophis son muy bajas. "Las probabilidades son básicamente de 1 en un millón de que un impacto de asteroide pueda desviar a Apophis lo suficiente como para ponerlo en peligro de una futura colisión después de 2029, y solo de 1 en mil millones de que pueda hacer que Apophis colisione con la Tierra en 2029", dijo.

"Calculé las probabilidades de que el asteroide Apophis, cuya trayectoria actual se calcula que lo llevará cerca de nuestro planeta pero sin sufrir daños en 2029, se desvíe hacia una trayectoria más peligrosa debido al impacto inesperado de un pequeño asteroide", explicó Wiegert. "Se trata del mismo tipo de asteroides pequeños que aparecen ocasionalmente en nuestra atmósfera como ' estrellas fugaces ' o 'bolas de fuego' y podrían golpear a Apophis de forma igualmente inesperada".

Wiegert explicó que en la investigación se preguntó si un asteroide impactaría durante el período de 2021 a 2027, cuando nuestros telescopios no podrían observar Apophis, y si esto podría desviarlo lo suficiente como para hacerlo peligroso. "El asteroide Apophis será prácticamente inobservable desde ahora hasta 2027 porque está en el cielo durante el día, por lo que podría ser impactado sin que nos demos cuenta inmediatamente del evento", continuó.

Ojos en el cielo

Apophis, fue descubierto en 2004 y encabezó la "lista de riesgo de impacto" de la Agencia Espacial Europea (ESA) y la Tabla de Riesgo Sentry de la Nasa durante casi dos décadas. Pero un sobrevuelo cercano del asteroide en marzo de 2021 mostró a los científicos de la Nasa que Apophis no chocará con la Tierra hasta dentro de al menos 100 años.

Los investigadores de la ESA anunciaron en julio que enviarán su nave espacial Ramsés en 2028 para vigilarla.

La ESA está redoblando sus esfuerzos para asegurar las defensas de la Tierra contra futuras rocas espaciales potencialmente cataclísmicas, tras el éxito de la misión DART de la Nasa en 2022.

En 2023, la Nasa rebautizó su nave espacial OSIRIS-REx para estudiar el asteroide en lugar de retirarla. La nave, que ahora se conoce con el nombre de OSIRIS-APEX (Orígenes, interpretación espectral, identificación de recursos y seguridad – Apophis Explorer), recuperó con éxito muestras de la roca espacial Bennu.