Una nota amenazante encontrada debajo de un colectivo este lunes por la madrugada dejó a Rosario sin transporte durante toda la mañana. Alarmados ante el mensaje intimidatorio hallado debajo de una unidad, los choferes decidieron  suspender la actividad no en modo de paro, sino a la espera de garantías de seguridad. Luego de una reunión con representantes del gobierno provincial y municipal, decidieron volver a prestar servicio ya bien pasado el mediodía. Estiman que los recorridos se normalizarán cerca de las 16. 

La amenaza en cuestión, según la información oficial, fue hallada este lunes alrededor de las 4.30 de la mañana debajo del interno 326 de la línea 153 de la empresa estatal Movi. Lo encontró el propio colectivero cuando comenzaba su turno. 

Alan Monzón/Rosario3

Inmediatamente, los delegados definieron replegar el servicio momentáneamente, a la espera de garantías de seguridad. A las 11 tuvieron una reunión en la sede local del gobierno provincial de la que se fueron con la promesa de más controles aleatorios entre pasajeros y refuerzos nocturnos y en los galpones. 

“Uno lamenta sabiendo que es una actividad neurálgica y los problemas que acarrea", dijo Sergio Mancini, de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), a la salida del encuentro este mediodía y confirmó que los delegados ya reorganizaban el trabajo en los galpones para que los colectivos vuelvan a la calle pero advirtió que no será rápido. 

Mancini aclaró que el regreso de los colectivos demorará unas horas. Calculan que para las 16 estará normalizado el servicio. (Foto: Alan Monzón / Rosario3)

"El ánimo no está bueno", había señalado esta mañana a El Tres un colectivero desde el galpón de Movi de Provincias Unidas y Rueda. "No estamos viviendo bien, Rosario sangra y es verdad y no hay soluciones", había lamentado y recordado a sus dos compañeros asesinados este año, César Roldán y Marcos Daloia. La semana pasada, dos colegas suyos activaron el botón de pánico en sendas situaciones amenazantes. 

Colectiveros reunidos en el galpón de Movi. (Foto: Alan Monzón / Rosario3)