Gaspar Servio se hizo gigante bajo los tres palos y con el penal atajado a Ramiro Carrera en la última acción del partido hizo que Central se llevara un punto de Tucumán. Tras el pitazo final, el arquero canalla se trenzó en una discusión con el volante de Atlético, que terminó pegándole una cachetada. "En el penal me dijo que nosotros no jugábamos por nada, hay que tener huevos para patear un penal y hacerlo", declaró después. 

Según contó el portero auriazul, todo empezó en los instantes previos a que Carrera ejecutara el tiro penal. "Hay que tener códigos en el fútbol. Yo le dije que él se jugaba todo en ese penal y que tenía toda la presión", reveló. 

Además, explicó que, aunque lo tenía estudiado como pateador, en la noche tucumana cambió de lado y adivinó: "Nunca había pateado ahí". 

Sobre el resultado que obtuvo Central, Servio rescató que su equipo hizo "un partido inteligente" pero que por los últimos resultados necesitan "ganar" para salir del mal momento. "Merecemos salir, no se nos están dando las cosas. Ante un rival muy duro nos pudimos llevar un empate", analizó.